viernes, 6 de noviembre de 2009

ESCAPAR DE MÍ MISMO

A veces lo necesito;salir, desconectar, llámalo como perfieras, pero todos tenemos momentos en los que deberíamos pararnos y contar hasta 10.000.
Muchas veces no nos damos cuenta y nos vamos "acelerando","es que estoy muy pillado de tiempo" es una frase muy común, y qué decir de "es que tengo un estrés!". Pero no paramos, todo es muy importante, muy urgente;no nos damos cuenta de que lo verdaderamente importante somos nosotros mismos. Ese no parar tiene sus consecuencias, que acaban pagando precisamente las personas que tenemos más cerca sean o no "culpables". Todo esto se va convirtiendo en una gran bola de nieve que crece mientras le damos la espalda y acaba por atraparnos.
Cada uno tiene sus remedios, ya sea pescar o hacer punto de cruz; el mío es ir en moto. Arranco la moto, me doy un paseo y vuelvo nuevo. Ir en moto requiere concentración, sinó estás pendiente te la pegas seguro, y el suelo está durísimo!
Sobre todo me gusta tomar carreteras con curvas, donde lo importante no es la velocidad, sino la pericia y la concentración. He tenido moto desde los 12 años, tengo muchos kilómetros y he conducido todo tipo de motos, sin embargo soy un piloto de trail, me gusta meterme por todos los sitios y ver lo que se oculta tras esa curva o ese camino de tierra. Antes no me tiraba en las curvas, pero desde que tengo esta moto y gracias también a las clases magistrales en vivo que me da un motero muy especial, tengo cada vez un paso por curva más rápido.
No es que piense competir, no tengo edad. No estoy loco, sé que debo tener muchísimo cuidado. Pero tomar así las curvas requiere toda mi atención, me voy examinando yo sólo. Si me equivoco de trayectoria o de frenada me "riño". Además en moto el chásis soy yo, y un pequeño error que en coche ni lo notas te puede costar la vida.
El otro día sentí la llamada de la selva, dejé a los niños en el cole, me puse la ropa de marciano y me fui. Se me había ocurrido ir tomando nota de la hora de paso por los pueblos para tener datos exactos de lo que se tarda en llegar. No es que me esté volviendo majara, eso ya lo estaba de antes, es porque toda o parte de esta ruta la haré con mis moteros de plástico.
Salí a las 09:15 en dirección a Paterna, el día era perfecto, sin viento ni nubes a excepción de unas pequeñas y bajas producto de la humedad.

Al llegar a Alcalá( sobre las 09:45) paré para hacer una foto del puente de piedra por el que se pasa, lo abré pisado tantas veces y hasta hoy no lo había visto!


Llegué a Puerto Gális sin cruzarme con nadie, ¡que distinto de cualquier sábado donde parece que estás en un circuíto!

De camino a Ubrique recordaba que había una pequeña ermita abandonada, me parece que ahora ya tiene dueño.

La carretera es más hermosa de lo que recordaba, las vistas espectaculares y el olor a madera intenso! lo que no ha cambiado son los quitamiedos con tela metálica.







Desde el cruce con la carretera de Cortes he visto Ubrique como nunca antes, siempre me había parecido el menos "blanco" de todos los pueblos blancos, estaba equivocado!







Las montañas ya están aquí, empiezo a subir hacia Benaocaz y su singular "torre" que protege su entrada.

Aquí las montañas rascan a las nubes que pasan!

El verde del campo me lleva a Asturias, en la costa todavía tenemos los tonos marrones y secos del verano.

La manga queda atrás, la recta que la recorre es especial como los quesos de aquí. No tengo más remedio que parar a comprar uno.


Al principio de la manga descubro un arbol del bosque tenebroso de Blancanieves. Es magia, he pasado muchas veces por aquí y jamás lo había visto!

En Grazalema veo la otra cara de las montañas y el efecto que tienen sobre las nubes ¡las han desecho en hilos!

Tomo la carretera que va al valle de Gaidóvar, una inmensa bajada seguida de una carretera hasta Zahara de curvas rapidísimas y buen asfalto.Tras pasar bajo la torre de Zahara(en dirección de nuevo a Grazalema, pero ahora por el Puerto de las Palomas) me recreo en el turquesa de las aguas de su embalse, propias del mar Caribe.



Ya veo el Puerto de las Palomas! el asfalto ondulado y la pendiente me hacen ir en marchas cortas, restos de derrumbes y la presencia de abetos me hablan de la dureza de estas alturas.







La altiva torre de Zahara pasa desapercibida desde esta altura. Tambien nosotros nos creemos importantes hasta que la vida nos demuestra cual es nuestro verdadero tamaño.




El frio es intenso a pesar de la ropa de moto, son 1357 metros de altura! la vista es espléndida! Qué diferente se ve ahora la carretera, parece la cuerda que un niño tiró al suelo!





De camino a Benamahoma voy viendo el avance del otoño, hojas que al secarse toman tonos dorados y pardos. En El Bosque paro para repostar y tomar café(el frío se me ha metido en los huesos) Al salir de El Bosque tomo una carretera que va a Algar. ¡Qué acierto! la carretera de sólo 17 kilómetros es adictiva, curvas lentas y rápidas, subidas y bajadas, es una montaña rusa!

Al pasar junto al embalse de Guadalcacín recuerdo una pista que va hasta la orilla, está ocupada por ganado bravo, mejor no molestar!


A las dos de la tarde llego a mi casa, me duelen la espalda y la rodilla, ya se notan los años!
Pero ha merecido la pena! me siento cien años más joven!

miércoles, 14 de octubre de 2009

Esas cosas que me gustaría haber dicho.

A veces, escuchando a alguien me doy cuenta de que está tomando forma en sus palabras una idea mía que yo no había llegado a concretar; puede que sea incluso parte del diálogo de una película o de un texto de un libro. Este es el caso: cada año suelo releer varios libros que no me cansan: “el señor de los anillos” incluyendo “el hobbit”, “Don Quijote de la Mancha”, la colección de Patric O´brian sobre el capitán Jack Aubrey, y algunos más. Y fue precisamente en el primero de esta saga “Capitán de mar y guerra” donde leí lo siguiente:
“A mí personalmente – ésta es sólo mi verdad – el hombre como parte de un movimiento o una multitud me es totalmente indiferente; es inhumano. Y no me siento atado a las naciones ni a los nacionalismos. Sólo experimento sentimientos – cualesquiera que sean – hacia los hombres como individuos; mi lealtad, toda la que puedo ofrecer, sólo es hacia personas concretas.”
-“¿Y no das valor al patriotismo? “
“Querido amigo, ya he acabado la discusión. Pero sabes tan bien como yo que patriotismo es sólo una palabra. Y generalmente acaba significando o bien mi país, con razón o sin ella, lo cual resulta odioso, o bien mi país siempre tiene la razón, lo cual es una imbecilidad.”
Este dialogo tiene lugar en el año 1800; sin embargo es plenamente vigente, o al menos, yo estoy totalmente de acuerdo con el personaje, en este caso el Doctor Maturin.

lunes, 27 de julio de 2009

LAS SEÑALES DE TRÁFICO RARAS

Algunas veces, al conducir vemos "señales raras", dejando a un lado los casos de intoxicación etílica a veces el MOPU y la DGT se alían para sorprendernos. Señales por duplicado, mal colocadas, de significado desconocido...

Entre ellas algunas me impactan más que otras. De esas trataré en este nuevo tema.
Como soy un jartible de las fotos iré subiendo las que más me ieran.
Ésta me la encontré en el embalse del rio Barbate, la primera vez que fui no me paré a hacer la foto, no se me quitaba de la cabeza, tenía que volver para hacerla.
Nunca había visto una señal tan oxidada!
El lugar tan poco es tan húmedo!
En la sierra, en las curvas de sombra perpétua no hay nada parecido!

Debe llevar tanto tiempo aquí que no serán en KM/H, sino en pasos por minuto como se mediría
La verdad que sólo falta el radar de la DGT.

ESAS SEÑALES RARAS

El otro día, al incorporarme a la autovía en dirección a Jerez desde la incorporación de la rotonda de ESPINOSA DE LOS MONTEROS vi de refilón una señal de tráfico que no "estaba bien", decidí volver en la moto para verla mejor.


Casualmente, la "pareja" estaba allí a la sombrita, así que de parar nada. Pero vi que me llamó la atención la 1ª vez, la señal está "castigada" contra la pared(en este caso vegetal).


Supe que tenía que volver para fotografiarla y saber que señal era!

Era una señal de retenciones!
Además giratoria !
Otra nueva modalidad de corta-moteros, si pasas sin cortarte el guardarail, te espera esta señal!


El sistema está controlado por vía satélite tal como se puede ver en la foto.


jueves, 23 de abril de 2009

La sirenita

El otro dia, mi hijo de cinco años me dijo al llegar del cole:
-Papi, tienes que inventarte el cuento de la sirenita!!!
Por supuesto papi se quedó con cara de poker y llamando al enano le preguntó:
-¿ que yó me tengo que inventar la sirenita? si ya está escrito!
-Si pero la seño nos ha dicho que tenemos que volver a inventarlo!
La seño me explicó que formaba parte de una actividad que se llama "cuentos de siempre contados como nunca" en la que había que reescribir un cuento, a ser posible cambiando roles machistas por otros más acordes con lo políticamente correcto.
Para ayudarnos nos daba un mandala para colorear de una sirena que sería la portada del cuento.
El mandala "casi" lo coloreó el enano, pero el cuento me lo tube que comer yó, de un día para el siguiente. Esto es lo que le pasó a la sirenita...




LA SIRENITA

El huracán Jean Michel había sido terrible.
Fueron tres días en los que el mar se fundió con el cielo, las olas eran montañas de espuma salada, las gotas de lluvia eran como cerezas que el viento huracanado arrojaba con fuerza.
Pero después vino la calma, el mar se convirtió en un inmenso espejo y el sol se mostraba en todo su esplendor.
Las gaviotas sobrevolaban la playa, que estaba llena de los despojos de un viejo barco carguero que no había podido soportar el huracán, encallando en el arrecife.
Sobre la arena un joven dormía, tendría unos 23 años, pero la vida en el mar le había envejecido. Poco a poco se fue recobrando y tras mirar a su alrededor empezó a recordar:
-¡La sirena! Me caí al agua cuando trataba de asegurar la carga, me hundí, todo era silencio y oscuridad, me estaba ahogando.
-Entonces la vi, me subió a la superficie, volví a respirar y no recuerdo nada más que su cara, era como un ángel.
Tenía hambre y sed, entre los restos del naufragio encontró una gran caja de conservas y explorando la isla encontró un manantial, al menos no moriría de hambre.
Como se aburría y había encontrado unos libros empezó a leerlos en un recodo del manantial, a la sombra de una palmera. Leer en voz alta le hacía sentirse acompañado, incluso le parecía que había alguien más con él.
-Empezaré con este, LA SIRENITA.
¡Qué susto se habría llevado si hubiese levantado la cabeza del libro!, en el agua frente a él había una sirena. Llevaba un rato escuchándole cuando al llegar a la parte donde la sirenita se enamora del príncipe no pudo más y dijo:
-¡Qué tontería, enamorarse de un humano! Eso no se lo cree nadie.
¡Tendríais que ver el salto que dio Manuel! El pobre se llevó un susto tremendo.
-No pongas esa cara dijo Coral, yo también te salvé y te traje a la playa, pero no estoy enamorada de ti. ¡Cómo se va a enamorar una sirena de un humano! ¡sois raros, ensuciáis el mar, lo destruís todo!¡ qué os creéis, ¿los dueños del planeta?.
Manuel no podía creerlo, ¡una sirena le estaba echando la bronca!
- No puedes pensar así de mí, no me conoces. Ni siquiera estoy seguro de no estar soñando.
Coral dio un aletazo en el agua que puso a Manuel correando.
-¿Te sueles mojar en los sueños? ¡Entonces estás despierto y yo existo!
-¿Cómo te llamas, humano?
-Me llamo Manuel, soy peruano y tengo 23 años, ¿y tú?
-Soy Coral, tengo 67 años.
-¿67? Pareces más joven, yo diría 25 años.
-Eso es porque yo soy de una raza diferente, nosotros solemos vivir más de 200 años.
-Manuel ¿podrías seguir leyendo? Esa historia me tiene intrigada.
-De acuerdo, leeré.
Coral escuchaba el cuento de la sirenita y no lograba entenderlo.
-Pero, ¿porqué quiere Ariel tener piernas? ¿nó es mejor nadar?
-Tal vez ella quisiera conocer otra forma de vivir, yo nací en un pueblo del interior, me embarqué para conocer mundo y, al final, incluso he conocido una sirena, ¿no te parece increíble?
-Bueno, pensándolo bien creo que me gustaría ver las montañas desde cerca, tocar la nieve…
Manuel y Coral siguieron hablando, todos los días estaban un rato juntos y cada uno aprendía algo del otro.
Meses más tarde un barco rescató a Manuel, no contó nada de la sirena, le habrían tomado por loco o quizá habrían intentado capturarla. Cuando se despidió de ella prometió no olvidarla y ella dijo que iría a visitarlo. Fue un momento triste, porque es triste despedirse de un amigo.
Pero los dos cumplieron sus promesas, siguieron viéndose y su amistad no tuvo fin, lo sé porque Manuel era mi padre.

¿fin?